Los petrodólares del jeque arrasan a un Granada que sigue de pretemporada

El dinero no da la felicidad pero no veas como ayuda a hacer un buen equipo con el que ganar partidos. Con tan rotunda 'sentencia' puede rersumirse el "espectáculo" de anoche en La Rosaleda, donde el Málaga goleó a un inofensivo Granada que aún está por hacer. Los albicelestes se apuntaron su primer triunfo de la temporada con goles a pares de Santi Cazorla, que dejó claro por qué pagaron diecinueve millones de euros por él y Joaquín, que reverdece sus laureles y recuerda que no hace mucho fue un pilar de 'La Roja'.

Hacía treinta y seis años que ambos equipos no se enfrentaban en Primera División. La última vez fue en 1975 y el resultado fue de empate a un gol. Anoche la situación era diferente. El mismo estadio, pero con más gente. Un excelente ambiente y una concordia entre aficiones. El equipo malagueño salió con un esquema diferente al empleado en Sevilla, hace quince días, con Duda haciendo de conductor del juego por Apoño, fuera del once por decisión técnica y con un solo delantero, ya que el venezolano Salomón Rondón fue reemplazado por el rápido y habilidoso media punta argentino Diego Bounanotte. El técnico del Granada Fabriciano González "Fabri", situó a cinco jugadores nuevos con respecto a los que jugaron de titulares en la primera jornada frente al Betis, el argentino Franco Jara, Diakhate, Martins, Yebda y el delantero nigeriano Uche. Había ilusión y ganas por parte de los granadinsitas, pero un gol tempranero de los locales echó todo al trate.

Sí. Al Granada se le puso difícil el encuentro, porque el Málaga, espoleado por una fiel afición se adelantó en el minuto cuatro con un disparo del centrocampista Santi Cazorla, que no pudo atajar el guardameta Roberto, al ir muy pegado al poste izquierdo. El Granada adelantó líneas y merodeó la portería del argentino Willy Caballero sin excesivo resultado. El Málaga tocaba en el centro del campo para frenar al contrario, aunque tenía problemas para burlar la férrea defensa del Granada. Cuando transcurría el minuto 25 en un partido más emocionante por el color de la grada que por el juego, un centro de Gámez por la derecha lo cabeceó Joaquín, consiguiendo el segundo gol. El Granada, entonces, se vino abajo y dejó de oponer resistencia ante un Málaga que se adueñó por completo del partido. Pese a todo, poco antes del descanso, el Granada a través de Dani Benítez hizo temblar La Rosaleda con un lanzamiento de falta que desvió el guardameta Caballero.

Tras el descanso, Cazorla, en su estreno en La Rosaleda, se erigió en la estrella del Málaga, porque en una falta, con la barrera mal colocada, su disparo raso significó el tercer gol en el minuto 47. Nuevamente un mazazo como en la primera mitad. Nada más inicarse el juegop el Málaga había vuelto a marcar y las energías insufladas por Fabri en el vestuario se vinieron abajo como un castillo de naipes. El Málaga no tenía problemas y con una gran pegada y una movilidad endiablada de sus cinco jugadores de arriba fabricaron una acción que finalizó Joaquín con una volea consiguiendo el cuarto gol.

No tuvo suerte el Granada, que se estrelló frente a los petrodólares del jeque. Hay que seguir trabajando porque Zamora no se ganó en una hora. Y el sábado nos vivita el Villarreal. Habrá que ir a poner una vela a la Patrona.