Creando cuenta de usuario x Introduce los datos para tu nueva cuenta en resultados-futbol.com
El nombre de usuario debe de tener entre 4 y 16 caracteres Ya existe un usuario con ese nombre El correo electrónico no es válido Ya existe un usuario con este correo electrónico * La contraseña debe tener como mínimo 6 caracteres * Las contraseñas no coinciden |
||||
Iniciar Sesión x Si lo prefieres, puedes acceder con tu cuenta de facebook: Si ya estás registrado, puedes Si ya eres usuario, también puedes El nombre de usuario debe de tener entre 4 y 16 caracteres Ya existe un usuario con ese nombre El correo electrónico no es válido Ya existe un usuario con este correo electrónico * La contraseña debe tener como mínimo 6 caracteres * Las contraseñas no coinciden Si lo prefieres, puedes acceder con tu cuenta de facebook: ¿Todavía no tienes cuenta de usuario? Si ya eres usuario, también puedes Si lo prefieres, puedes acceder con tu cuenta de facebook: ¿Todavía no tienes cuenta de usuario? Si ya eres usuario, también puedes |
Imagen subida por: Blanquiazul
Había una vez un hombre que se hacía llamar Tony Thompson, un empresario sueco adinerado y lleno de contactos que todo lo que tocaba lo convertía en oro. La Grama estaba de suerte por caer en su punto de mira. El club, con deudas hasta el cuello, se convertiría en una potencia, los empleados cobrarían sus atrasos, la afición recobraría la ilusión y el equipo cumpliría el sueño de subir a Segunda A.
Hasta aquí el cuento. Ahora llega la realidad. Tony Thompson, el presunto salvavidas de la Gramenet, es un estafador de libro. Solo es cierta su procedencia: sueco de nacimiento. Nada más. Su nombre real es Tony Antonio Pastor. Hace unos meses, hizo un estudio de los clubs catalanes en los que podía desembarcar y vio en la Grama el blanco ideal. Vicente Ferrer, el presidente, le creyó a ciegas y firmó un acuerdo de patrocinio de tres años con Gramenet Investments Group, una empresa fantasma que no figura en el Registro Mercantil.
El dinero de la mujer
El pasado diciembre, el falso Thompson soltó 200.000 euros para el club. El dinero procedía de su pareja, Janet Elizabeth Kitchen, que se había divorciado meses antes. Con esa cantidad se ganó la confianza de muchos y adquirió plenos poderes.
También los jugadores fueron engañados. A Pedro, el goleador del equipo, lo convirtió en su asistente personal. Era su chófer y pasaba todo el día con él. «Al principio me trató como un hijo, pero poco a poco me di cuenta de que era un fantasma. Siempre llevaba el dinero metido en plásticos. Jamás pagaba con tarjeta. En noviembre, sacaba billetes de 500 euros, luego de 100, después de 50. De comer solomillo pasamos a comer de menú. Todo era de la mujer, él estaba pelado», explicó ayer Pedro a este diario.
El punta aún no se cree lo que ha vivido. El domingo pasado hizo las maletas junto a su novia para irse a Suecia. Aarón, otro jugador, y su pareja también estaban preparados. Thompson les había prometido un gran fichaje. Pero pasaban las horas sin novedades. A las seis de la mañana del martes, Pastor llamó a Pedro para decirle que estaba amenazado de muerte y que necesitaba que le dieran cobijo. Mentira. Había sido desahuciado de su apartamento en Diagonal Mar. «Fui a por él y me encontré 20 maletas. Me di cuenta de que era peligroso. El miércoles le engañamos para que fuera al campo. El vio que algo fallaba y se quiso escapar bajando de mi coche en marcha. Se quedó blanco», cuenta Pedro.
Ahí se destapó todo. Pastor aseguró que se iba a Gran Bretaña por motivos personales, pero no tenía un euro. Janet, consciente de la estafa, lloró sin parar. Ayer, el timador se puso en contacto con ella. Todos pensaban que había volado, pero estaba en Barcelona y su pareja, que le había denunciado, siguió las indicaciones de los Mossos para tenderle una trampa. Por la tarde, fue detenido en la Plaza de Catalunya. Pasó la noche en el calabozo de las dependencias de Santa Coloma y hoy pasará a disposición judicial.
Thompson estaba perseguido por la policía de su país por estafar 70.000 coronas a una mujer y 40.000 a un club. «Aquí ha habido una estafa moral, pero no económica. Este hombre puso 200.000 euros aquí. Ahora la situación es crítica. Si no llegan ingresos de forma urgente, podemos desaparecer», aseguró ayer Ferrer. La idea del sueco era apoderarse de todos los ingresos para escaparse en el futuro. Pero le salió mal la jugada. La Grama tiene una deuda global de 1,6 millones, un agujero negro del pasado que tiene hundida a la afición y puede conducir a un terrible abismo.